sábado, 28 de febrero de 2015

EL MITO Y LA LEYENDA

EL MITO Y LA LEYENDA
Para entender estos términos  digamos que el mito es un hecho que se recrea constantemente, y como se sucede una y otra vez va tomando características diferentes.  en cambio la leyenda es un hecho trascendental, histórico, generalmente telúrico, que no se volverá a repetir, como ejemplo podemos  mencionar la leyenda  del  “Cai-cai vilu y de Ten-ten Vilu”, que en una pelea colosal formaron las islas de Chiloé,  pero ellos ya no volverán a pelear, en cambio “el Caleuche” es un mito, porque sigue apareciendo y cada vez que aparece, lo hace con características propias, es decir quien los describe como espectador del barco Caleuche, lo describirá según su entendimiento, según lo que vio o imagino ver- por tanto un relato nunca será igual a otro, solo conservaran las características básicas.
            Por otro lado la leyenda tiende a explicar hechos que serian difícil de explicar  sin un conocimiento científico, así en cambio en forma fantástica se cuenta un cuento que  tiene características muy particulares, en donde el ser humano es parte importante, pero no hace la leyenda, generalmente es favorecido por ella, aunque sea el quien  inspire un sentimiento que haga nacer la leyenda. En cambio el mito es permanente, no es un hecho pasado, este se repite en el tiempo, y normalmente tiende a justificar o explicar ciertas conductas que deben ser observadas o justifica conductas que sin la mitología no serian aceptadas, toleradas o se volverían un peligro para el propio  humano y para su convivencia.
            Ejemplos:
El Caleuche: evita perderse en el mar.
El Trauco: permite aceptación de la infidelidad
            La Pincoya: permite la conservación ecológica
            El Camahueto: permite el asentamiento humano en zonas no  peligrosas.
            Si observamos los mitos, leyendas y costumbres de Chiloé desde una mirada antropológica, nos podemos dar cuenta de la tremenda sabiduría  que encierran, aunque el mito parezca estúpido. Esta es una característica del chilote, al cual todos pertenecemos de una forma u otra, el verdadero chilote  es ese que aparenta estupidez, mientras que por dentro tiene una tremenda sabiduría, cuando nosotros nos reímos de ellos, ellos  se han reída ya diez veces de nosotros         .

            Cuando  yo llegue e Chiloé, lo primero que hice fue comprarme un gorro de lana y unas medias chilotas, para parecerme a ellos, y me costo como un año darme cuenta que los chilotes usaban “parkas montañas”, “zapatillas Nike” y “calcetines fiorucci”,  que molían manzanas a vara, mientras en sus muñecas deslumbraban hermosos relojes “orient” y en la cintura portaban teléfonos de ultima tecnología y los únicos estúpidos que nos comprábamos el cuento eran estos “afuerinos con gorritos de lana”          

No hay comentarios: