SERVIR, SERVICIO O SERVIDO...

POR ETELVINO AGUILA OJEDA

Aunque estemos lejos de la capital, o nos salpicamos o creamos nuestro propio barrito, pero si de barro se trata, parece que a todos nos gusta poner las manos. Será nuestro pasado animal que nos orienta a la vida fácil, al ocio bien aprovechado, al menor esfuerzo, al engaño y la mentira, en fin como en el tango, en este mismo fango “todos revolcados”. ¿A que me refiero? . Si, me refiero a las irregularidades de Chile deportes, de la subsecretaria de Pesca, de la cuenta de los parlamentarios, de las platas del plan empleo, de los ciento de sumarios en casi todas las municipalidades del país, de los cientos y miles de proyectos brujos, raros, deformes, ajustados a la fuerza, etc. de todo tipo de fundaciones, organizaciones, programas gubernamentales, programas intergubernamentales y tantos otros que sería largo de enumerar.
Estoy tratando a todos de corruptos, no, nada mas lejos que eso, en realidad somos los menos corruptos de esta hermosa América morena, lo que pasa es que somos así, indiocincracia del chileno le llaman. Pero cuando nos llaman a un cargo publico, vamos o nos proponemos como los que vamos a “servir”, ese es nuestro horizonte, nuestra meta, nuestra filosofía de vida, pero después de un tiempo y cuando ya “agarramos confianza” una boletita de algún gasto superfluo, se rinde como gasto de representación o se justifica entre los gastos, un uso de vehículo en horario no autorizado, una factura de esto o lo de mas allá y así vamos de a poquito pasando del servidor por supremacía a servicio por retribución. Al “ yo hago porque me pagan y si no me pagan, yo me pago”. Y desde aquí a ser servido solo un paso.
Prontito nos creemos emperadores, faraones, jaguares y es vengan a mí porque yo soy todopoderoso, sírvanme porque yo les serviré a ustedes. Hagan lo que les digo, porque todo lo que yo toque se convertirá en oro. Aquí no es como en las bodas de Caná, que por necesidad se hace el milagro, aquí primero se hace el milagro y después se inventa la necesidad.
En fin, nunca me he podido explicar porque hay tantos que pelean por un cargo publico, cuando es archisabido que ese cargo no es una taza de leche, como una municipalidad por ejemplo, con todos los problemas de salud, empleo, educación, obras viales, vivienda, etc etc. A quien se le ocurre proponerse para enfrentar ese caos, solo a un mártir, yo preferiría que me claven en un madero, con los pies hacia arriba eso si... como Pedrito. Sin embargo miremos nuestra realidad, como muestra un botón, la Municipalidad de Ancud, tres veces el alcalde destituido y tres veces revocada la sentencia ,que de líos, de dimes y diretes, de acusaciones y de contra acusaciones, de pleitos y de alegatos, bueno no es el caso comentar, pero me pregunto todos esto señores “son mártires de su pueblo”, no lo creo, no veo aureolas. Entonces a que vienen, solo porque quieren servir, o será porque quieren servirse, o aspiran a que sean servidos.
Yo paso, porque yo entiendo el servicio como una vocación, en la que no se espera recompensa, “que tu derecha no sepa, lo que hace tu izquierda” perdón esto no es política, es evangelio... da hasta que te duela... y no saca hasta que le duela a los otros... servir debería ser poner al servicio de los otros nuestro esfuerzo, nuestra inteligencia, nuestra razón, nuestra capacidad, sin esperar recompensa... que se te retribuya por lo que haces es de toda lógica y de toda razón, el cobrar o asegurar la retribución por el uso de mis talentos y dones es un servicio. Es un negocio. Pero el cobrar, gastar, usufructuar por adelantado de nuestros talentos usándolo o sin usarlos siquiera aprovechándose, eso es servirse.
Cual será mi medida hoy. ¿Servidor, servicio, o servido? Buna pregunta, muy buena pregunta...... y como andamos por casa??.